El deseo sexual es cuándo nuestro cerebro detecta algo como excitante, sexual, provocador…
Ahora bien, ¿qué te provoca? Estamos hablando que este tipo de estímulos puede variar según la persona, es decir, no a todos nos tiene que provocar las mismas situaciones o personas y no por eso somos «raros» (para gustos los colores). Ahora bien, si de repente algo que jamás te provocaba, empieza a ponerte perraca, ¡¡no te preocupes!! No es nada raro, simplemente esos estímulos pueden variar por muchas circunstancias. Pero cuándo parece que encontramos ese estímulo, nuestro cuerpo produce como un chorreo continuo de sensaciones imparables…
Una vez que nuestro cuerpo entra en contacto con esa sensación, se producen cambios muy importantes en él, tanto en el aparato genital como en el resto del organismo. Hay un aumento de la frecuencia cardiaca, un aumento de la presión arterial y la piel se enrojece porque aumentan los receptores.. Por no hablar de nuestro estado de ánimo, nos volvemos más alegres, divertidas, ¡¡Nos sentimos «on fire 🔥»!! Por no hablar de la autoestima, vamos ¡¡que nos queremos comer el mundo y lo que no es el mundo!! Tu mirada cambia, su mirada también, por eso aquello de que las miradas son una señal perfecta en la química, en la conexión y como no, en el deseo.
La mirada se vuelve deseosa, luminosa, tu vagina aumenta hasta dos tercios de su tamaño normal, hay una hinchazón de la vulva, de los labios menores y mayores, sentimos erección en los pezones, la piel se eriza, aumenta la lubricación… ¡¡Vamos una maravilla en toda regla!! Esto con tan solo sentir ese estímulo de deseo sexual, por lo que si el juego continúa y la excitación también, todo esto va en aumento hasta alcanzar el orgasmo..
Hasta ahí todo bien, ¿verdad? Pero, ¿qué pasa cuándo sentimos que no encontramos deseo sexual por ningún sitio? Qué parece, que todo aquello que nos ponía cashondas ha desaparecido, se ha escondido, esfumado, fus fusss!!! Nuestro cuerpo, no responde bajo estímulos sexuales…
Realmente la falta de deseo sexual es común en ambos sexos y suele ocurrir acompañado de otro factor, estrés, ansiedad, falta de autoestima...
Pero como en YOMELOPASOTETA nuestro lema es claro «repartir placer» hoy vamos a facilitaros algunos tips para aumentar ese deseo sexual hasta el punto que vayas sintiéndote como una perraca por la vida, en modo «on fire 🔥».
La ansiedad, el estrés, los factores que más puede afectarnos para una baja autoestima y por su puesto la libido, por lo cual también es una barrera importante para el funcionamiento sexual. Tan fácil y sencillo como cambiar el chip mi niña, tiempo, dedícate tiempo, incluir «rutinas» en tú día a día que de verdad, deberían ser comunes y las pasamos siempre a segundo plano… Y si hay algo que tenemos que tener muy claro es que…
LO PRIMERO SIEMPRE ERES TÚ Y DESPUÉS TÚ y luego ya si eso, TÚ TAMBIÉN.
Una buena rutina del sueño, descansar, dedicarte tiempo para ti, a hacer cositas que te gustan, hasta una simple duchita creando tu espacio, puede cambiar tu día. Practicar tu hobby favorito, moverte, salir, hacer deporte, una buena alimentación… Y por supuesto ¡¡ESTIMULARTE!! Y no hablo solo del potorro (qué también).
Recuerda estimular tus deseos de forma diaria, no permitas que esa llama se te apague, tú eres tu mayor diamante y eso hay que pulirlo, aprende a dedicarte tiempo y regalarte momentos que hagan de ti, una personita más feliz ¡¡TE LO MERECES!!
Ahora bien, Yoanna ¿Cómo pulo mis deseos? ¿Cómo pulo mi diamantito?
Ñe ñe ñe… ¡¡ME ENCANTA!! realmente, es algo que repito de forma contínua y no me cansaré jamás de insistir en ello, porque parece TAN SIMPLE, pero tan simple, que dejamos de darle importancia, ahh bahhh!! y NO LO HACEMOS y por ello, cae todo, así, como cae un polla ante una situación cortante, pués igual!!
Mi niña, tenemos que estimularnos, potenciarnos, activarnos, pisar por la calle como diosas en celo.. ¡¡CÓMETE EL MUNDO Y DEJA QUE TE COMAN!! pero jamás que te pise, por eso ¿Cómo activamos esto? ¿Cómo entramos en modo perracas que se comen el mundo?
Pues aquí la receta más sencilla mi niña: CUIDÁNDOTE
Provoca tus estímulos, créate una rutina en la que incluyas cositas saludables que te hagan sentir mejor y por su puesto TIEMPO PARA TI. ¿Qué no tienes tiempo? Bueno, es la mayor excusa que tenemos entre nuestras manos, pero si de verdad quieres mejorar, quieres gozar y sentirte una diva perraca debes empezar a dedicarte algo de tiempo por poco que sea, de esa manera, cuándo descubras la magia que tiene, te aseguro, que poco a poco irás incluyendo más y más… hasta que te critiquen que eres una egoista que solo piensas en ti, ahí estarás en el énfasis perfecto.
Por su puestísimo pisa la calle con ganas de comerte el mundo, sintiéndote la diosa que eres, sal en modo «on 🔥 fire» Crea tu ritual antes de salir, como hablamos anteriormente con tu velita en el baño, creando así un ambiente mágico
Incluye en tu vida algo de cosmética erótica para aumentar tu líbido, como feromonas, velitas en el baño para tu ritual de ducha
Aplícate un aceitito de masaje por tu cuerpo cuándo salgas de la ducha, si tiene feromonas mejor que mejor, aquí os voy a dejar uno de mis favoritos y de toda tetera que lo ha probado, porque de verdad, es una delicia cargada de feromonas, no solo ideal para aplicar en tu cuerpo como cremita hidratante, sino también para tu pelo…
Aplícate unos polvitos en la cara y por supuesto, no salgas de casa sin aplicarte ese perfume que subirá no solo tu líbido sino de todo el que se te acerque…
Un «brilli brilli» vibrador para esos morros
Y por su puesto JAMÁS SALGAS DE CASA SIN MASTURBARTE
Cárgate de energía, cárgate de autoestima, de superación, cuídate, mímate, regálate momentos, disfruta de ti y potencia el mujerón que llevas dentro. Y sobre todo comete el mundo.
Por su puestisimo, no
